Esta frase se me quedó grabada cuando vi Forrest Gump por primera vez. Y siempre que veo esta película (maravillosísima, por cierto), esta frase me llama especialmente la atención.
Y como me llamó tanto la atención, pues decidí comprobarlo. Y, debo decir que ES MUY CIERTA.
Me estoy dando cuenta, ahora que tengo el coche en el taller y debo ir en metro a trabajar, que la gente se «sostiene» sobre su «podio» personal, es decir, sus zapatos representan su ser. Y esto es muy de lenguaje corporal, y me encanta, he de añadir.
Qué mejor ejemplo que yo misma. Después de mirar y remirar los zapatos de la gente, y ver cómo se corresponden a su dueño, me detuve a mirar los míos. Y son una verdadera lástima: los uso rotos (la gran mayoría) por la suela, se me suele despegar la punta y la gran mayoría tienen rotos o rayajos; y los que están nuevos o son más elegantes, no los utilizo porque veo que no van conmigo. ¿Qué quiere decir esto?
Bajo mi humilde y leve conocimiento sobre lenguaje corporal, esto representa que últimamente no estoy cuidando mucho mi bienestar, pues es donde me sostengo, y está rasgado y roto (suela partida). He sufrido varios acontecimientos que no logro superar (rayajos). No me cuido casi nada, como a mis zapatos, y no me considero (ni quiero considerarme) elegante. ¿Es esto cierto? Pues desgraciadamente sí. No es una de mis mejores épocas, y mi calzado lo representa.
Entonces, teniendo un ejemplo tan claro y tan evidente, ¿cómo no voy a poder fiarme de esto? Mirando los zapatos de los demás, descubres cosas muy personales, tal vez demasiado personales. Pero, ¿no lo es todo lo que utilizamos?
Personalmente, los zapatos me llaman mucho la atención (no es fetiche, cuidado). Quizá nos deberíamos fijar más en las cosas menos «interesantes» más a menudo. Y comprarnos zapatos nuevos y cuidarlos mejor, lo más importante.
Oh dear... 